Cuando Esther y yo nos quedamos embarazados por primera vez, Luar na Lubre fue elemento indispensable en esos 9 meses. Cogimos la recomendación de ponerle música al feto durante su gestación pero cambiamos a Mozart “pola música da terra”. Con Luar na Lubre sonando en casa todo el día Álvaro creció en Esther y creció bien. Vuestras notas forman parte de su ADN y después de 7 años comprobamos como Álvaro se ha metido en la Escuela de Música y demuestra una sensibilidad extrema ante este arte. Fueron muchos los momentos que pasé con él en el colo viendo videos vuestros en YouTube y divertiéndonos tocando sus primeros instrumentos musicales al son de vuestras melodías.Luego han venido Inés y Juan y han descubierto en Luar na Lubre la historia de su papá, sus orígenes, su idioma, su cultura. Para los que vivimos lejos, más o menos, de Galicia es imprescindible y necesario encontrar nuestra manera de seguir unidos al ombligo que nos dio la vida. Yo lo consigo gracias a vosotros. Y eso es difícil explicar con palabras lo que significa. Porque siempre se echa de menos la casa, la familia, el mar, la tierra, la lluvia, el olor, el sonido…
Santiago Casanova