Os conocí cierto día de hace muchos años cuando, estando con una amiga en la sección de discos de una gran superficie, nos dispusimos a escuchar algunos. Pero como siempre, todos los cascos estaban ocupados… todos salvo uno. Ni corta ni perezosa me calcé el que estaba libre y «Cabo Do Mundo» empezó a girar. No tenía la más mínima referencia de ese grupo misterioso.
Pues bien, la revelación fué con la tercera pista. Sólo con «Raqueiros» ya conseguísteis tres cosas de mí: interesarme por vosotros y vuestra música, convertirse en mi canción favorita y la más importante: ganarme para siempre. No hizo falta más. Tuvo que ser esa gaita maravillosa la que me agarrara de las tripas para decírme que aquello era algo por lo que merecía la pena apostar.Mi primer concierto vuestro fué más de una década después del flechazo. Concretamente el 6 de Mayo de 2011 aquí en Bilbao, en el Antzokia. Por unas cosas y otras, no he podido conoceros en vivo hasta ese día. Pero he imaginado el momento cientos de veces, os lo aseguro. Y la espera mereció la pena.
Menudo puntazo cuando salísteis a escena, me parecía increíble teneros allí, en vivo y en directo por fín.
Cómo lo puedo resumír… colmásteis con creces todas mis expectativas; y yo por mi parte bailé, canté, no me cansé de aplaudir y participé de todo lo que nos regalásteis a los allí presentes en esa noche mágica, ya para siempre grabada en mi memoria. El setlist de Xulio y Pedro guardado como un tesoro y una camiseta de recuerdo.Deciros que cuando hablo de vosotros os refiero como «mi grupo»; que he transmitido ésta música a propios y ajenos; que por vuestra influencia me encanta la música celta en general; que tenéis la «culpa» de las palabras que conozco del galego y de hecho con determinadas canciones conseguís que me sienta casi de allí… y en definitiva, que siempre seréis uno de mis grupos de cabecera.
Lara González Velasco